Todos los calcetines de dedo Knitido® se tejen para que se adapten lo mejor posible a la forma de su pie.
Para que se sientan cómodos durante todo el día y tus pies puedan moverse con naturalidad.
85% algodón, 12% nailon, 2% poliéster, 1% elastane
7 cm
Lavable a máquina hasta 60°C. No planchar ni secar en secadora.
¿Quiere iniciarse en el mundo de los calcetines de dedos? Los calcetines de dedo Essentials son el modelo ideal para iniciarse, fabricados en algodón de alta calidad, suave y cómodo. Disponibles en varios colores lisos, para combinar con cualquier look.
Todos los calcetines de dedo Knitido® se tejen para que se adapten lo mejor posible a la forma de su pie.
Para que se sientan cómodos durante todo el día y tus pies puedan moverse con naturalidad.
Los calcetines "normales" suelen tejerse empezando por el puño y coserse en los dedos, lo que puede resultar muy incómodo.
En Knitido® es al revés: empezamos a tejer por los dedos de los pies para evitar costuras. Por eso nuestros calcetines de dedos siempre resultan tan cómodos.
Un ajuste estudiado hasta el último detalle y los dedos separados ayudan a proteger los pies.
Especialmente entre los dedos de los pies se produce el agradable efecto de que los dedos no pueden rozarse entre sí.
La humedad no se acumula tan fácilmente en los calcetines de dedos.
¿Qué significa eso?
Donde no hay humedad, no pueden desarrollarse los gérmenes responsables del mal olor. Los pies permanecen limpios y secos durante más tiempo.
Con los calcetines de dedos, los pies pueden moverse mucho más libremente y siguen estando bien protegidos.
Los dedos más móviles reciben mejor la sangre y se mantienen calientes. Al mismo tiempo, las zonas entre los dedos son agradables y secas para que no se acumule el sudor.
Esto significa que los calcetines de dedos son ideales para el frío y también para el calor.
Los pies que pueden moverse con libertad y naturalidad tienen músculos más fuertes y son menos propensos a la desalineación.
Con los calcetines para los dedos de los pies estás dando el primer paso en la dirección correcta: llévalos con zapatos que dejen espacio suficiente para los dedos y notarás cómo mejora tu salud a largo plazo; no sólo tus pies, sino también tu espalda y tus articulaciones te lo agradecerán.
